Siempre me hizo mucho gracia la gente que te invita a cenar a su casa y que a pesar de no haber cocinado en su vida y en lugar de hacer una tortilla de patata fácil o comprar unos sencillos patés, van y se crecen y te preparan un Humus o un pescado al horno.
Todavía recuerdo aquella historia del Hombre Oruga que me contó hace tiempo.El caso es que una Orugina Krenka de un bosque lejano y con tetas gigantes le invitó a su árbol a cenar con intenciones más allá de una velada gastronómica.
Después de un largo camino ,El Hombre Oruga,un gran gourmet de paladar excelente, empezó a contárle de las famosas recetas sabrosas que él preparaba en su árbol. Ella,temiendo un fracaso estrepitoso de aquel pescado que en su vida habia cocinado y viendo que el Hombre Oruga sabía lo que se hacía entre los fogones decidió apagar sus sentidos crujiéndole dos botellas de vino.
Cuando la cena salió de el horno,el Hombre Oruga estaba ya panza arriba agitando las patitas complementamente ebrio.Él, decidió servirle a ella . En su sorpresa ,comprobó la imposibilidad de partir aquellas patatas semicrudas y ese pesacado correoso.La verdad ,es que la pinta no era nada mala ya que ella utilizó el truco de llenarlo todo de cebolla con el objetivo de enmascarar semejante estropicio.
Al terminar la cena, el Hombre Oruga ,en un gesto de educación ,con el bolo alimenticio en la boca , con una sonrisa tremendamente falsa y mientras se sacaba las espinas de las orejas le dijo:
-Efhhtá buenfhhhfffísimo!Ella, viendo las lágrimas de mi mejor amigo del bosque decidió pasar a la accion y llevárselo a la cama con el estomago lleno.Ya en el dormitorio,recién cenados e intendo resolver una digestión terrorífica , ella decidió entrar a la accion metiéndole mano en el paquete. Él ,todavía aturdido por la gran ingesta de alchol ,se dejó hacer hasta que pasó un rato y ella intentó pasar a la
copulatio , momento en el cual ,él se dió cuenta del semejante
orco que tenía encima y se zafó de ella alegando que era hemafrodita (excusa barata que utilizan las Orugas del bosque cuando no quieren pinchar).
Moraleja.Nunca fueron buenos los Experimentos.Por simple que sea,cocina lo que sepas.
Nota :Este relato esta basado en hechos reales gracias al testimonio de mi gran amigo El Hombre Oruga.